La, recién creada, Asociación de Vecinos de Triquivijate solicita a las instituciones públicas de la isla que adopten las medidas necesarias para evitar que la escasa lluvia que cae en Fuerteventura perjudique a los residentes en las zonas del pueblo cuyas carreteras no están asfaltadas.
El “mejor” ejemplo lo hemos vivido hoy mismo, apenas unas gotas han convertido en barrizales los caminos por donde tienen que pasar las personas y vehículos para acudir a sus obligaciones ( colegio, trabajo, compras,…).
A pesar de que el Alcalde del municipio, Gustavo Berriel, había prometido que estas zonas se asfaltarían después de la instalación de las nuevas farolas, lo cierto es que a estos núcleos poblacionales no han llegado ni la luz ni el asfalto, a pesar de que los vecinos que residen en ellas pagan los mismos impuestos que los demás.
Tememos que cuando comiencen las lluvias más frecuentes haya, incluso, zonas que queden aisladas por carretera, algo inaudito en pleno siglo XXI.
