La mano de 1,4 millones de años del Homo erectus dic18 d

Homo erectus es un homínido extinto, que vivió entre 1,8 millones de años y 300 000 años antes del presente (Pleistoceno inferior y medio). Los Homo erectus clásicos habitaron en Asia oriental (China, Indonesia).



En África se han hallado restos de fósiles afines que con frecuencia se incluyen en otra especie, Homo ergaster; también en Europa, diversos restos fósiles han sido clasificados como Homo erectus, aunque la tendencia actual es la de reservar el nombre Homo erectus para los fósiles asiáticos. El volumen craneal muy variable, aumentando a lo largo de su dilatada historia. Tenía una capacidad mayor que la del Homo habilis y que la del Homo georgicus encontrado en Dmanisi.

Los primeros restos que se encontraron del Hombre de Java muestran una capacidad craneal de 850 cm3, mientras que los que se encontraron posteriormente llegan a los 1100 cm3. Poseía un marcado toro supraorbitario y una fuerte mandíbula sin mentón, pero de dientes relativamente pequeños. Presentaba un mayor dimorfismo sexual que en el hombre moderno. Era muy robusto y tenía una talla elevada, hasta 1,80 m de medida. La industria lítica que producía pertenece principalmente al Achelense y probablemente dominaba el fuego.

Ahora, un grupo de científicos ha encontrado un hueso de la mano de un ancestro humano que vagaba por la tierra en el este de África hace aproximadamente 1,4 millones de años y que sospechan que pertenecía a la especie humana temprana, el ‘Homo erectus’.

Este descubrimiento, publicado en ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’, es la evidencia más temprana de un moderno cambio de la apariencia humana, lo que indica que esta característica anatómica existía más de medio millón de años antes de lo conocido previamente.

“Este hueso es el tercer metacarpiano de la mano, que se conecta con el dedo medio. Fue descubierto en el yacimiento ‘Kaitio’ en West Turkana, en Kenia”, dijo la profesora de Patología y Ciencias Anatómicas en la Universidad de Missouri, en Estados Unidos, Carol Ward. “Lo que hace que este hueso sea tan distinto es la presencia de una apófisis estiloides o proyección de los huesos en el extremo que se conecta a la muñeca. Hasta ahora, este proceso estiloide sólo se ha encontrado en nosotros, los neandertales y otros homínidos primitivos”, agrega.

Los seres humanos tienen una anatomía distintiva de la mano que les permite hacer y usar herramientas, una característica que los simios y otros primates no humanos no posee y de la que se desconoce el momento en que apareció por primera vez en la evolución humana.

 El proceso estiloide ayuda al hueso de la mano a bloquear los huesos de la muñeca, permitiendo aplicar una mayor cantidad de presión a la muñeca y la mano para el agarre del pulgar y los demás dedos.

Ward y sus colegas señalan que la falta de la apófisis estiloides genera desafíos para los simios y los humanos anteriores cuando intetaban fabricar y usar herramientas, de forma que, la falta de un proceso estiloide puede haber aumentado las probabilidades de tener artritis antes, según Ward.

El hueso fue encontrado cerca de los sitios donde han aparecido las primeras herramientas de piedra achelenses, entre las que se incluyen hachas de mano de más de 1,6 millones de años. Ser capaces de hacer este tipo de herramientas precisas indica que estos primeros humanos estuvieron casi con toda seguridad utilizando sus manos para muchas otras tareas complejas, según esta autora del estudio, realizado por un equipo del proyecto ‘West Turkana Paleo’, liderado por Fredrick Manthi, de los Museos Nacionales de Kenia.

“El proceso estiloide refleja una mayor destreza que permitía a las especies humanas primitivas realizar potentes apretones precisos en la manipulación de objetos. Esto era algo que sus predecesores no pudieron hacer por la falta de esta apófisis estiloides y su anatomía asociada”, dijo Ward.


Aurea Gutierrez
Divulgadora Científica – Crónicas Aureas
Fuentes para compilación de este artículo: ep, tw, wikipedia,
Blog: http://cienciacronica.wordpress.com