Aparecieron tres varones adultos y un niño asociados
a un mismo grupo social en esta sepultura colectiva
Se trata del primer yacimiento funerario que se
descubre en Fuerteventura en 34 años, y el primero que se estudio de manera
multidisciplinar
10 de diciembre de 2013
Tras analizar los restos
óseos y materiales extraídos hace un año en el yacimiento funerario del Barranco
de Los Canarios, en la zona sur de
Fuerteventura, los resultados de su estudio han permitido constatar que
se trata de una sepultura colectiva –con tres individuos varones adultos y un
niño- fechada entre los siglos XI y XIII d. de C.
El Cabildo de
Fuerteventura ha dado esta mañana a conocer los resultados de la investigación realizada
por encargo de la institución a la empresa Tibicena Arqueología y Patrimonio, destacando
que se trata del primer yacimiento de tipo funerario descubierto en la Isla de Fuerteventura
en 34 años, y el primero en investigarse utilizando la metodología arqueológica
moderna por parte de un equipo multidisciplinar. El acto contó con la presencia
del presidente del Cabildo, Mario Cabrera, el consejero insular de Cultura y
Patrimonio Histórico, Juan Jiménez, y la arqueóloga Rosa López en
representación del equipo multidisciplinar que ha materializado los trabajos de
excavación.
Las principales conclusiones
de la excavación son la confirmación de la existencia de un poblamiento en el
sur de Fuerteventura –refutando las tesis anteriores al respecto-, la identificación
de tres adultos varones y un niño en una misma sepultura colectiva, constatando
con la pertenencia de los cuatro individuos a un mismo contexto social o grupal,
y la datación del yacimiento en un rango que va del año 1040 en el individuo
más antiguo al 1260 el más moderno.
Además, el estudio
bioantropológico de los huesos realizado tanto a pie de campo como en
laboratorio ha permitido conocer interesantes datos sobre el modo de vida y las
costumbres de los cuatro individuos, como que contaban con una dieta principalmente
proteica (basada en carne, pescado, marisco), que caminaban por lugares
agrestes, que soportaban cargas de peso considerables, o incluso que uno de los
individuos pasó por épocas de hambruna.
Intervenciones
Mario Cabrera quiso
recalcar y agradecer “la participación de los cazadores que dan el aviso a las
autoridades cuando aparecen hallazgos arqueológicos, en el caso de este
yacimiento el vecino Juan Placeres, la Guardia Civil que ha facilitado la
derivación de la investigación al Departamento de Patrimonio Histórico del Cabildo,
o al servicio del SEPRONA de este mismo cuerpo y los agentes de Medio Ambiente
del Cabildo que se han ocupado de la vigilancia de la cueva”. Sobre el Barranco
de Los Canarios donde se ha localizado el yacimiento, el presidente señaló que “evidentemente
se trata de un lugar especial utilizado por nuestros antepasados desde hace un
millar de años, elegido por el artista Pepe Dámaso para ubicar uno de sus
proyectos más ambiciosos con la creación del mirador en la degollada, e incluso
esta misma semana por el cineasta Ridley Scott para rodar una parte de su
película sobre el éxodo de Moisés y el pueblo judío”.
Juan Jiménez valoró positivamente
la “confirmación de la existencia de ritos funerarios prehispánicos y preeuropeos
en Fuerteventura en un momento del que no se tenía constancia hasta ahora”,
siendo además “el primer hallazgo de estas características que se produce
en 34 años, desde que se descubriera en
los años 70 el yacimiento funerario de un adulto y un menor en una cueva de
Villaverde”. También destacó el consejero que la aparición de estos cuatro
individuos “rebate la opinión reinante hasta el momento, evidenciando que
existía un poblamiento en el sur de la Isla antes de la conquista,” y anunció que
este tipo de hallazgos "nos animan a las instituciones a seguir realizando
investigaciones de este tipo”.
La arqueóloga Rosa López trasladó
en nombre de la empresa que la realización de este estudio ha permitido “sentar
las bases para el análisis de los contextos funerarios de la isla, utilizando
un método multidisplinar y moderno que ha de ser el punto de partida para otros
estudios posteriores”, considerando también la importancia de impulsar un
programa de recuperación del patrimonio arqueológico funerario majorero”.
Localización
Zona conocida como Solana
del Cuchillete, en una de las laderas del Barranco de los Canarios (municipio
de Pájara, Fuerteventura). El solapó se encuentra excavado en una angosta cueva
correspondiente a un tubo volcánico, con una entrada de un metro y un fondo de
tres metros. El fondo de solapón funerario, realizado en piedra, se encuentra a
1,5 metros de profundidad.
Metodología y elementos
del yacimiento
El equipo
multidisciplinar ha contado con las intervenciones de distintos profesionales, destacando
un restaurador-conservador para asegurar la conservación de los elementos
extraídos, y una bioantropóloga que ha analizado in situ y en laboratorio los
huesos de los individuos de la sepultura colectiva.
El solapón funerario se
identificó al estar delimitado por una estructura de piedra. La retirada por
niveles estratigráficos de los elementos óseos y culturales descubiertos ha
permitido su análisis en laboratorio a partir de diferentes pruebas. La
excavación tuvo lugar entre septiembre y diciembre de 2012, para llevar a cabo
a continuación los análisis de los elementos en laboratorio y la elaboración
del informe de resultados.
En laboratorio se realizaron dataciones
radiocarbónicas (C14) de los cuatro individuos, enmarcando el yacimiento entre
los siglos XI y XIII de la era actual. Los huesos de los dos individuos cuyas
dataciones resultaron positivas arrojan dos franjas de fechas, de 1160 a 1260
para el individuo más moderno –el primero en aparecer o Individuo 1-, y de 1040
a 1120 para el Individuo 3, en este caso el niño. Los adultos medían entre 1,72
y 1,75 metros de altura, y contaban con entre 35 y 45 años de edad.
El deterioro de los
huesos analizados impidió que las pruebas genéticas de ADN dieran resultados positivos. No siendo posible establecer
una relación de parentesco entre los individuos, “la naturaleza del yacimiento
sí constata una unidad grupal o social en la utilización de este espacio a lo
largo de distintas generaciones, y la existencia de un sentimiento colectivo
por parte de este grupo”, explicó Rosa López.
En el fondo del solapón
se identificaron restos de fuego y otros elementos como las cuentas de collar
anteriores a los depósitos funerarios, dando lugar a dos hipótesis sobre si se
trataba de un rito de sacralización del lugar o sobre una utilización corta y
estacional de la cueva.
Junto a los restos óseos, en el solapón funerario
de Los Canarios aparecieron otros elementos como dos vasijas y las cuentas de un
collar de conchas completo. Cabe destacar que en otro punto del barranco, otro
yacimiento se ha asociado a un asentamiento poblacional, al rescatarse otras dos
vasijas de cerámicas aborigen integradas en una estructura arquitectónica, posiblemente
un almacén, apoyando la hipótesis del poblamiento de la zona.
Las dos excavaciones se
han tutelado desde el Cabildo de Fuerteventura y han sido ejecutadas desde la
empresa Tibicena Arqueología y Patrimonio. Los depósitos patrimoniales del Cabildo
custodian en estos momentos todos los elementos extraídos del yacimiento a la
espera de poder utilizarlos para el conocimiento y difusión de la cultura
aborigen, posiblemente en el marco del Museo Arqueológico Insular en fase de
construcción en la Villa de Betancuria.
Los hallazgos
arqueológicos dados hoy a conocer han constatado las hipótesis que apuntaban a
la existencia de un importante poblamiento
en la zona sur de Fuerteventura antes de la conquista de las Islas Canarias, lo
que supone una novedad con respecto a los posicionamientos históricos
predominantes hasta el momento. Las últimas investigaciones han abierto una
puerta al conocimiento de la cultura aborigen majorera tras un periodo de más de
30 años sin producirse descubrimientos de relevancia.
