El Betis sigue en la UCI

El Real Betis Balompié no pudo pasar del empate en el partido de ida de la eliminatoria de Europa League frente a un Rubin Kazan que estuvo con diez sesenta minutos y que llevaba más de dos meses sin competir.


A pesar del mal momento que atraviesa el conjunto verdiblanco, el equipo de Calderón se encontraba ante la noche perfecta para intentar levantar la moral de la tropa. Muchas rotaciones, muchas oportunidades para jugadores que vienen actuando menos y que pueden ser importantes en el tramo final de liga. Uno de ellos, Dídac, se  inventó una gran jugada en el minuto cuatro de partido que acabó con el balón en el fondo de las mallas. Los pronósticos deportivos de la web de bet365 se cumplían por el momento.

El Betis, renacido, mandaba, generaba ocasiones y hacía levantarse a la grada. Especialmente activo, como de costumbre, estaba Leo Baptistao. El jugador cedido por el Atlético de Madrid parece que juega a un ritmo distinto a sus compañeros desde su llegada. Encara, se asocia, llega y dispara, aún sin la suerte del gol pero siempre generando cosas positivas para su equipo.

Para más viento a favor, Prudnikov dejó a su equipo con diez a la media hora de partido. Más dominio, más ocasiones, más fiesta en el Villamarín. Pero las dinámicas son traicioneras y el Betis está en barrena. Los pupilos de Calderón  no fueron capaces de transformar sus ocasiones y en el 74 el colegiado se inventó un penalti que era falta fuera del área. Emerenko lo transformó y subió el empate al marcador. De la goleada al empate. Increíble.

Así, y a pesar del asedio bético, el marcador ya no se movió. Un nuevo palo para el Betis, una de las mejores apuestas de la liga bbva la pasada campaña. En ésta, condenado al descenso. Mucho tienen que cambiar las cosas.

Guillermo Fernández